De verdad que estoy hasta arriba del budi alen de marras.
Que si le regalan dinero de mis impuestos para una peli que me cobrarán si quiero ver, que si toca la flauta en algún lado, que si el ministro de tal se saca fotos con el allen, que si se pasea por las ramblas, que si ahora rueda por allá, que si le gusta el tomate, que si su esposa viene con una amiga, que si usa sombreros …. ¡basta ya, por favor! Estoy cansada de encontrarme estas chorradas en portada de elperiodico. ¿Quién es Woody Allen? En su tierra no lo conoce ni dios. Recuerdo el año pasado en no se qué programa que se dedicaron a preguntar en el país de residencia del tal Allen a la gente de la calle si sabían quien era y nadie tenía idea de quién era Woody Allen.

Pretende hacer una historia que será “una carta de amor a Barcelona”. Una carta de amor a una ciudad que no conoce. Una ciudad en donde es invitado a todas partes. Una ciudad que ha puesto un recurso que pagan los ciudadanos como es la policía a disposición de este señor para que ruede cerrando el acceso a calles a vecinos en vez de estar vigilando por la seguridad del ciudadano de a pie. Este señor no puede dedicar una carta de amor a una ciudad cuya esencia real no va a conocer nunca. La carta de amor es a una ciudad que le lame el culo y le regala dinero y titulares absurdos en prensa. Tal vez debiera hacer una historia que se llamara “Bienvenido mister Allen” que trate de cómo un pueblo se vuelca a agasajar a un americano (de los e.e.u.u) y le cantan eso de “Americaanooos, vienen a España guapos y saanoooos”.

Sentando este precedente se nos va a llenar el país de directores de cine estadounidenses en declive buscando subvenciones y ser tratados a cuerpo de rey de gorra a costa del bolsillo del sangrado ciudadano. Hay que joderse.